Sea el nombre de Dios exaltado sobre todo nombre, de modo que ante Él, toda rodilla se doble, en el Cielo y en la Tierra.
Manuel Luque se persignó ante la Imagen de Dios que llegaba a su Taller de la Sierra cordobesa. Musitó una oración, acompañada de cábalas y sentimientos. La obra del maestro Blanco Pajares descansaba junto a los bocetos en barro de su propia producción escultórica, dejando en el aire la última huella de incienso recibida en su Misa de despedida del templo que acoge a nuestra Hermandad.
Manuel es hombre cabal, andaluz que ha sabido llevar ese don al arte, cofrade por la gracia de Dios.
La policromía es una forma de convertir la madera en carne. Los óleos pictóricos empleados por Manuel reciben de sus hermanos sacramentales la unción precisa para santificar sus obras. La piel que cubre la obra del maestro Juan Blanco Pajares es ahora el sello de 585 años de historia Veracrucera andujareña.
Dios exaltado sobre todas las cosas.
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